La economía de España se dispone a afrontar varios retos y posibilidades en 2025. De acuerdo con el estudio ‘Perspectivas 2025’ desarrollado por BBVA Research, se prevé un crecimiento constante y moderado, potenciado principalmente por áreas como el turismo, la construcción y la adopción de estrategias sostenibles.
Miguel Cardoso, principal economista de BBVA Research para España, señala que, aunque en 2024 se temía un posible estancamiento económico debido al incremento de los tipos de interés y la inflación, las proyecciones se han ajustado al alza gracias a la mejora en el empleo y las exportaciones de servicios. Para 2025, se anticipa que la economía española siga en una trayectoria de crecimiento, aunque con algunos riesgos vinculados a factores tanto internacionales como locales.
Un elemento que podría impactar la economía española es el desenlace de las elecciones en Estados Unidos, ya que el triunfo de Donald Trump podría crear un escenario de mayor inflación debido a políticas que amplíen el déficit público. Dentro del ámbito doméstico, la accesibilidad a la vivienda se presenta como un reto, con incrementos previstos en los precios durante los siguientes dos años.
El mercado laboral en España presenta indicios prometedores, con la proyección de crear aproximadamente 425,000 empleos en 2025. Además, se aprecia un aumento en la participación laboral de determinados grupos, especialmente entre las mujeres de 25 a 45 años. No obstante, la consolidación fiscal en Europa, motivada por la urgencia de disminuir el déficit público y la deuda, podría influir negativamente en el crecimiento económico.
El mercado laboral español muestra señales positivas, con la expectativa de generar alrededor de 425.000 puestos de trabajo en 2025. Además, se observa un incremento en la participación laboral de ciertos grupos, especialmente entre las mujeres de 25 a 45 años. Sin embargo, la consolidación fiscal en Europa, impulsada por la necesidad de reducir el déficit público y la deuda, podría tener un impacto negativo en el crecimiento económico.
Por otro lado, los sectores del turismo y la inmobiliaria presentan perspectivas prometedoras para 2025. La economía de España, con un crecimiento superior al promedio de la UE y una alta rentabilidad por dividendo, brinda un entorno propicio para invertir. Sobresalen empresas en áreas como la inmobiliaria, con firmas como Merlín y Colonial, y en el ámbito industrial, con compañías como Acerinox y Arcelor. Asimismo, el sector de semiconductores muestra potencial, con empresas como ASML, VAT Group y KLA Corporation a la cabeza del mercado.
Por otro lado, el sector turístico y el inmobiliario presentan oportunidades atractivas para 2025. La economía española, con un crecimiento superior al promedio de la UE y una alta rentabilidad por dividendo, ofrece un entorno favorable para la inversión. Se destacan empresas en sectores como el inmobiliario, con firmas como Merlín y Colonial, y en el industrial, con compañías como Acerinox y Arcelor. Además, el sector de semiconductores muestra potencial, con empresas como ASML, VAT Group y KLA Corporation liderando el mercado.
A pesar de las perspectivas positivas, los directivos empresariales mantienen una actitud prudente de cara a 2025. La rápida transformación tecnológica y la inestabilidad global, con Europa debilitándose, están frenando la inversión en el continente. Durante el VII Congreso de Directivos de la Asociación para el Progreso de la Dirección (APD), se destacó la importancia de la inteligencia artificial, la digitalización y la atención a los riesgos geopolíticos. Aunque el crecimiento económico es saludable, se atribuye principalmente al aumento de horas trabajadas y no a la productividad, lo que indica la necesidad de reducir barreras regulatorias y fomentar la inversión privada para mejorar la competitividad.